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El timo del cambio de lotería sigue siendo el más frecuente, ¿En qué consiste y en cuáles lugares actúan los estafadores?

Las principales víctimas son jóvenes entre 15 y 23 años.

Por Paula Ruiz

Tiempo de Lectura: 3 minutos
El timo del cambio de lotería sigue siendo el más frecuente, ¿En qué consiste y en cuáles lugares actúan los estafadores?
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El timo del cambio de lotería sigue siendo el más frecuente, según las investigaciones realizadas por la Fiscalía. Sus víctimas son personas jóvenes entre 15 y 23 años, según las denuncias recibidas en esa institución.

Polette Nájera, fiscala de la Unidad de Trámite Rápido de la Fiscalía Adjunta del I Circuito Judicial de San José, explicó cómo es este timo y pidió a la población presentar las denuncias correspondientes.

Nájera detalló que se trata de un timo callejero en donde una persona entre 58 y 65 años de edad, valiéndose de su condición de adulto mayor, se acerca a un joven para decirle que viene de una zona lejana de San José y que, necesita cambiar un premio de lotería.

Mientras se da esta interacción, entra un segundo estafador con el objetivo de brindar confianza a la víctima.

Lo que hace esta segunda persona es decirle a la primera que él le ayudará a hacer el cambio y le deja sus pertenencias como muestra de que regresará a entregarle el dinero.

Unos minutos después, tras fingir que hizo el trámite, le entrega el dinero frente a la víctima. La primera persona, en señal de agradecimiento, le regresa algún dinero. De esta manera, la víctima cree que con él sucederá igual.

Aquí es donde la víctima acepta hacer el cambio de otro premio y deja sus pertenencias. Cuando se acerca a la Junta de Protección Social (JPS) o a un supuesto distribuidor autorizado, es informado de que el billete es de un sorteo anterior, no posee premio y que es víctima de estafa.

Al regresar, ya no encuentra ni al timador, ni sus pertenencias.

Nájera detalló que las víctimas suelen ser estudiantes, tanto de colegio como universitarios o bien, que solo transitaban por el lugar porque se dirigían a realizar alguna diligencia.

“La conclusión que se da es porque son personas jóvenes que no conocen este tipo de criminalidad, este tipo de timos y ahí entra el engaño de las personas mayores”, señaló la experta.

El modus operandi se efectúa entre 9 a.m. y 3 p.m., horas en que los estudiantes suelen estar dirigiéndose hacia su centro educativo o saliendo de él. Así las cosas, se da a plena luz del día pues es parte de la estrategia para generar confianza en la víctima y suelen estar en áreas concurridas por transeúntes.

Nájera reportó que con base en las denuncias presentadas, el casco central de San José es donde más se frecuenta este timo, sin embargo ya han detectado casos en San Ramón y Grecia pues son las mismas personas que, tras ser identificadas en la capital, optan por irse a lugares más alejados.

“Mediante las denuncias que hemos recibido, sabemos que los bienes que estas personas han sustraído son bolsos, billeteras y celulares. También personas jóvenes que han entregado su bulto con materiales del colegio, computadores y tabletas; incluso tenemos un caso de un joven que es repartidor y perdió su bicicleta”, detalló la fiscala.

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Un delito de baja penalidad

Este timo es considerado como estafa menor que está contemplado en el artículo 216 del Código Penal donde se contemplan penas de 2 meses a tres años.

Al tener una baja penalidad, dificulta que el Ministerio Público pueda solicitar cárcel contra esas personas, reconoció la vocera.

“Por ser bajo permite que las personas a pesar de haber sido denunciadas y que sean condenadas por un delito, puedan seguir en libertad y cometiendo este tipo de timos”, señaló.

Es por esta razón que solicitó a las personas presentar las denuncias dado que por reincidencia sí pueden solicitar una medida más alta que implique descontar la sanción en un centro carcelario.

Nájera reconoció que muchos jóvenes no proceden porque les da vergüenza al percatarse que cayeron en una estafa.

Ella recomendó a las personas continuar su trayecto cuando un timador les solicite dejar sus pertenencias en cualquier circunstancia.

En caso de haber optado por detenerse a escuchar al estafador, lo mejor es que le indique que se dirija a un oficial de Fuerza Pública o de la Policía Municipal para que sean ellos quienes puedan orientarlo.

Finalmente, sugirió a la población tener malicia cuando alguien se le acerque con este tipo de solicitudes ya que se pensaría que ningún extraño le solicite cambiar un premio, dado que en primera instancia puede recurrir a algún familiar.

La imagen principal es con fines ilustrativos.