Tomás Gómez
El presidente Carlos Alvarado salió en defensa del trabajo que realiza el despacho de su esposa, Claudia Dobles, luego de que la diputada socialcristiana María Inés Solís cuestionó este viernes el pago mensual millonario al staff de 10 asesores que tiene la Primera Dama.
El mandatario aprovechó su gira por Guanacaste para destacar las labor de Dobles a quien, en abril pasado, designó como encargada presidencial de la región.
“Ella no pidió el rol de primera dama, ella le tocó serlo por estar casada conmigo”, dijo el mandatario durante las celebraciones de la Anexión del Partido de Nicoya este sábado.
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Según explicó Alvarado, su esposa pidió trabajar y no ser una “figura decorativa”, con lo que ha asumido diversas labores en Casa Presidencial.
Una de ellas es, precisamente, la de delegada presidencial para la región guanacasteca, visitada por la pareja este sábado y donde Alvarado enfatizó sobre el desarrollos de diversas obras públicas que según él se lograron gracias al “seguimiento feroz” del oficina de su esposa.
“Faltan muchas otras cosas pero sé que se completarán porque hay alguien que está detrás de ellas, pujando, pidiendo cuentas y haciendo que las cosas se cumplan y eso a mi me llena de confianza, de optimismo y de fuerza, se que de parte del Gobierno de la República, Guanacaste está en un muy buenas manos. Las mismas manos que se encargan de mi hijo son las manos que se encargan de Guanacaste”, concluyó el Presidente.
Staff de dudas
Tras consultas realizadas por la diputada socialcristiana María Inés Solís, Casa Presidencial indicó que la oficina de Claudia Dobles cuenta con un equipo de 10 asesores que reciben salarios base de entre ¢333.000 y ¢1,3 millones.
El tema sumó cuestionamientos dado que Dobles no es funcionaria pública, ni tiene responsabilidades oficiales.
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Según explicó la diputada Solís, sus dudas surgieron luego de que en una audiencia de la Comisión Especial de Infraestructura, en el marco del análisis sobre el proyecto de empréstito para el tren rápido de pasajeros, la Primera Dama aceptó que no tiene responsabilidad alguna si esta iniciativa de movilidad no resulta.
«Son más de ¢7 millones, sin contar los pluses salariales, del despacho de alguien que ni siquiera es funcionario público sin responsabilidaes legales y administrativas que cuente con esta cantidad de asesores, me genera consultas adicionales, las cuales estoy preguntando nuevamente, para conocer esas responsabilidades administrativas y funciones de cada asesor, a quien reportan y quien es responde como jerarca sobre sus actuaciones», sentenció la diputada.
