Hermes Solano
El 2023 inició violento, similar a cómo terminó el 2022, el año con más homicidios en la historia del país, con un total de 656.
Los primeros 13 días del año ya registran 29 asesinatos, según lo indican las estadísticas del Organismo de Investigación Judicial. Este número es mayor al que se dio en el mismo período del año anterior, donde hubo 22.
Es decir, hay 7 muertes más que el año anterior, lo que genera preocupación en las autoridades del país.
De esas 29 muertes violentas, 10 son de mujeres. El martes, mataron a una en San Juan de Dios de Desamparados cuando iba en su carro. Este jueves por la noche en Alajuelita murió otra por arma de fuego.
Limón y Puntarenas siguen siendo las provincias con el mayor número de casos y problemática de este tipo. La lucha por venta de drogas y territorios ha generado ese aumento en las muertes violentas.
En el Atlántico se han registrado 8 homicidios en 13 días, 5 más que en el mismo período del año anterior.
Por su parte, en el Pacífico se han dado 6, tres más que el año anterior.
San José y Heredia suman cuatro casos cada una; mientras que en Alajuela y Cartago han matado tres personas en cada uno de esos lugares.
En Guanacaste se registra un asesinato en lo que va del año.
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Más plata
El jueves estuvo en la Asamblea Legislativa el ministro de Seguridad, Jorge Torres, hablando de la problemática de seguridad que hay en San José y otras partes del país.
Torres confirmó que es Limón, Puntarenas y Alajuela, principalmente en la Zona Norte, donde se están dando los mayores problemas.
El jerarca dice que se necesita dinero y presupuesto para poder contratar policías que estén en las calles.
“Plata, más plata y más plata si queremos solucionar esto a corto plazo, porque lo que necesitamos son policías en las calles”, dijo el ministro, señalando que en este momento tienen que estar trasladando oficiales de un lugar a otro.
“Tenemos que mover equipos para llegar a los lugares donde más violencia tenemos”, dijo.
El año pasado, la tasa de homicidios fue de más de 12 por cada 100.000 habitantes, la más alta en la historia de Costa Rica.
