Mariana Mena
La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) emitió una alerta amarilla por la desaparición de Keibril.
Así lo informó este lunes, la oficina de prensa del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en relación con el caso de la menor de 9 meses, de la cual desde hace dos semanas no se sabe de su paradero.
Según explica la Interpol, una notificación amarilla es una alerta policial mundial sobre una persona desaparecida.
“Se publica para localizar a víctimas de rapto por uno de los progenitores, retenciones (secuestros) o desapariciones inexplicadas. También puede utilizarse para ayudar a descubrir la identidad de una persona incapaz de identificarse a sí misma”, resaltan.
Además es un instrumento importante para las autoridades, especialmente si existe la posibilidad de que viaje al extranjero.
A pesar de la alerta, el OIJ mantiene la línea de investigación de que la menor fue dejada en estos terrenos. La sospecha de que estaría en otra zona y bajo custodia de terceros ha sido descartada.
La policía judicial atendió llamados de alerta en Heredia, Guápiles y otros lugares del país, pero sin resultados.
Autoridades continúan labores de búsqueda en Cartago por la desaparición de Keibril.
OBSERVE MÁS: Sospechoso de raptar a Keibril es investigado por tres delitos de violación y uno de sustracción de menor de edad
Búsqueda
En la finca de El Trapiche en Juan Viñas, cerca de 40 personas entre agentes del OIJ, Cruz Roja y Fuerza Pública, retomaron la búsqueda.
Hasta el momento, el único indicio encontrado en esos puntos relacionados a Keibril, es una pijama de bebé entre los 6 y 12 meses con manchas de sangre.
“Sobre el análisis de la ropa que se envió al laboratorio, todavía no se tiene el resultado. De haber alguna novedad se estará informando”, indicó la oficina de prensa del OIJ.
Dentro de la línea de investigación, se han realizado búsquedas en Pacayas de Alvarado y en Santiago de Paraíso, sectores por dónde estuvo el sospechoso el día del rapto.
El único detenido por la desaparición de la bebé, es el padre biológico, un hombre de 33 años y de apellido Casasola, quién actualmente descuenta prisión preventiva.
La fiscalía lo acusa por tres delitos de violación en contra de la mamá de Keibril, una adolescente de 13 años.
Así como un cargo por sustracción de menor de edad, cometido en contra de la bebé desaparecida desde el 9 de abril.
De acuerdo con el Sistema Costarricense de Información Jurídica, las penas por los delitos son:
- Por cada caso de violación: de 12 a 18 años de cárcel
- Sustracción de menor de edad: la pena va de los 35 a 50 años de cárcel
“La pena será de veinte a veinticinco años de prisión si se le inflige a la secuestrada lesiones graves o gravísimas. Y de treinta y cinco a cincuenta años de prisión, si muere”, señala la instancia judicial.
Sin embargo, la pena máxima en Costa Rica es de 50 años de prisión.
