Paula Ruiz
“Julia está un poco más fuerte” Así reportó este sábado el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) el avance de la tormenta tropical que se dirige hacia Centroamérica.
Es por esta razón que tanto este Centro como el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) prevén que este fenómeno se convierta en huracán este mismo sábado.
“Se prevé que Julia se intensifique a huracán durante la tarde de este mismo sábado, cerca de las islas de San Andrés y Providencia (Colombia) y continúe su desplazamiento hacia la costa de Nicaragua”, informó el IMN en su boletín.
“Se espera que se convierta en huracán más tarde este sábado”, subrayó el NHC.
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A eso de las 9:15 a.m. de este sábado, la tormenta tropical estaba ubicada en el norte de Panamá y se dirige hacia el oeste en dirección a Nicaragua a 33 kilómetros por hora (km/h) con vientos sostenidos de hasta 165 km/h, informó el IMN.
Estas condiciones provocarán lluvias intermitentes desde la mañana y tarde en el Caribe, Zona Norte y montañas de norte del país.
Sin embargo, habrá un incremento de lluvias a partir de la noche en el Pacífico, particularmente en el Pacífico Central y Pacífico Sur.
“El Valle Central tendrá lluvias intermitentes durante la tarde y noche”, estimó el Instituto.
Precauciones
Se estima, que el Pacífico Central y Pacífico Sur es donde habrá mayores montos de lluvia y la influencia de este fenómeno se mantendrá en el país durante el sábado y domingo.
Esto implicará que en las zonas costeras del Pacífico se registren ráfagas de entre 40 y 60 km/h, mientras que en las costas de Limón y montañas del norte, se podrían presentar con intensidad de entre 25 y 50 km/h.
Tome en cuenta que habrá oleaje alto en ambas costas por lo cual, no se recomienda la navegación de embarcaciones pequeñas y medianas.
Es muy probable que en cuatro regiones del país, Julia provoque inundaciones. Según el IMN, se prevé en Pacífico Central, Pacífico Sur, Zona Norte y montañas del caribe.
Aunado a ello, se puede presentar saturación de suelo provocando posibles deslizamientos.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) emitió una serie de recomendaciones para salvaguardar la vida de las personas y sus mascotas.
Recomiendan no cruzar áreas inundadas ya sea en vehículo o a pie. Asimismo, le solicitan a las personas que viven en áreas afectadas, identificar albergues con tal de tener un lugar seguro donde mantenerse.
Además, piden a la población no dejar animales amarrados en aquellos lugares propensos a inundación ya que el nivel del agua podría aumentar a tal punto que los sobrepasa, ocasionándoles así la muerte.
Por último, solicitan a la población, atender las recomendaciones que sean emitidas mediante el sistema de emergencias 9-1-1.
En tanto, el NHC prevé que Centroamérica se verá afectada por inundaciones y deslizamientos “de tierra potencialmente mortales”.
Por el momento, hay alerta amarilla en Zona Norte y Pacífico Sur y alerta verde en el resto del territorio nacional.
Imagen tomada del Centro Nacional de Huracanes donde muestra la trayectoria de Julia este sábado en la mañana.
La misma trayectoria
Por otra parte, el IMN confirmó que la trayectoria de Julia es similar a la de Juana que impactó el istmo en 1988 y la de César en 1996.
El IMN apunta que Juana y César pasaron por las costas de Venezuela y Colombia, alcanzaron grado de huracán al entrar al Caribe y tocaron tierra en el Caribe de Nicaragua.
Fue un 10 de octubre de 1988 cuando Nicaragua sufrió la afectación del huracán Juana, categoría 4.
En la vecina nación arrasó con viviendas, tendido eléctrico y árboles. Solo en la localidad de Bluefields se indicó que el 95% de los edificios desaparecieron.
Daniel Ortega -quien gobernó en ese entonces- aseguró que se trató “del mayor desastre natural en la historia de Nicaragua”.
En tanto, César hizo estragos en Costa Rica provocando:
- 34 muertes
- 29 desaparecidos
- 1.417 viviendas destruidas
- 170 puentes inutilizados
El caso más dramático en nuestro país ocurrió el Llano de La Piedra, en Tarrazú (zona de Los Santos), donde 11 personas perdieron la vida al ser sepultadas por un alud.
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