Josué Alvarado
La ministra de Educación Pública, Katharina Müller, informó este domingo que presentará ante el Consejo Superior de Educación (CSE) una propuesta que consiste en reducir el porcentaje que pesan las pruebas estandarizadas en la nota de graduación de los alumnos de sexto de escuela, undécimo y duodécimo de colegio en Costa Rica.
Así lo informó la jerarca pasadas las 9 p.m. de este 6 de agosto a través de un video. Según la jerarca la propuesta la presentará este lunes 7 de agosto.
Las pruebas estandarizadas que el Ministerio de Educación Pública (MEP) aplicará a los graduandos en noviembre próximo tienen un valor del 40% de la nota que les permitirá obtener el título. El restante 60% se define según el trabajo y los resultados en el aula.
El Observador consultó al MEP cuál es el nuevo porcentaje que propondrá la jerarca. Sin embargo, la cartera respondió a través de la Oficina de Comunicación que no lo pueden revelar hasta que la propuesta sea presentada ante el CSE.
Esta noticia se da a conocer luego de que el pasado jueves 27 de julio un grupo de alumnos se manifestara en el centro de San José para reclamar por estas pruebas que el MEP pretende aplicar y de la cual depende su graduación.
Según los manifestantes, el ministerio pretende hacer estos exámenes a pesar de la mala preparación que han tenido. También dicen que no tienen suficientes datos sobre la metodología.
Además, reclaman que el sistema educativo todavía no agarra ritmo tras el apagón que sufrió durante la pandemia y que miles de estudiantes llevan clases en condiciones insalubres e inhumanas, lo que impide su adecuada preparación.
Según la ministra Müller, la propuesta de rebaja en el porcentaje que presentará este lunes responde a las solicitudes de los estudiantes. Sin embargo, aclara que siempre se tendrá que hacer la prueba como requisito de graduación.
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Cambio se fundamenta en resultados de pruebas diagnósticas
Según Müller los resultados obtenidos por los alumnos en las pruebas diagnósticas que se hicieron en marzo anterior son los que fundamentan esta rebaja en el porcentaje.
“Esta decisión se fundamenta en la revisión de los resultados de la prueba diagnóstica que se llevó a cabo con el propósito de que los estudiantes pudieran conocer cómo es la prueba y que el MEP pudiera identificar mejoras y ajustes necesarios para la aplicación de la prueba sumativa de fin de año”, comentó la jerarca.
Las pruebas se aplicaron tanto a estudiantes de primaria como secundaria.
En ambos casos, el nivel de desempeño que predomina es el básico. En primaria, un 39,04% obtuvo este nivel, mientras que 37,89% intermedio y 23,07% están en un nivel avanzado.
Para secundaria la diferencia es aún más fuerte: un 50,21% están en nivel básico frente a 31,04% en intermedio y 18,75% avanzado.
Esto se traduce en que 9 de cada 10 estudiantes de primaria pasarían la prueba y 7 de cada 10 de secundaria la ganarían.
Estas pruebas se realizaron a 76.000 estudiantes en 3.680 centros educativos de todo el país.
En el caso específico de primaria, los estudiantes tuvieron que resolver una sola prueba en esta etapa y los de secundaria realizaron dos exámenes.
