Sergio Arce
Los organizadores de Miss Panamá anunciaron su renuncia a la franquicia del certamen, al aducir diferentes razones, entre ellos la falta suficiente de patrocinadores.
“Lamentablemente no contamos con el tiempo necesario para obtener la aprobación de derechos de franquicia en el momento preciso.
“Esto nos impidió captar los patrocinadores necesarios para cubrir los elevados costos asociados con la producción y preparación de nuestras representantes”, reza el comunicado que emitieron a inicios de esta semana.
Incluso, en el texto denunciaron aparentes irregularidades en el pasado Miss Universo, que se celebró en El Salvador y que terminó con la victoria de la nicaragüense Sheynnis Palacios.
“Nos hemos enfrentado a situaciones donde el público tenía conocimiento de directrices y cambios antes que nosotros, las franquicias.
“Entendemos la naturaleza mediática de elegir a una ganadora entre más de 80 mujeres, pero esta situación se complica cuando se otorgan privilegios a directores y equipos de trabajo durante la concentración, sin nuestro conocimiento como organización”, agrega el comunicado.
Los ahora exorganizadores agradecieron a Nathasha Vargas, actual Miss Panamá, por su trabajo en el pasado certamen.
“En cuanto a nuestra representante, quien realizó un trabajo excepcional elevando el estándar de las representantes panameñas, le expresamos nuestro sincero agradecimiento por su dedicación y compromiso durante ambos certámenes”, apunta el texto.
Otras franquicias se mueven
Tras el Miss Universo dos franquicias previas a Miss Panamá presentaron movimientos importantes, aunque en uno de los casos se trata más bien de la persecución estatal.
Esta es la realidad que vive la directora de Miss Nicaragua, Karen Celebertti, y su familia, que están viviendo los ataques del gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Celebertti no pudo ingresar a su país tras acompañar a Palacios a San Salvador y luego a México. La familia de la empresaria vive el hostigamiento de la policía y hasta medios locales indican que el esposo de la mujer y el hijo de ambos permanecen desaparecidos.
Incluso, la policía publicó un comunicado en el que acusa al progenitor y a su hijo de “conspiración antipatria” y actos relacionados con “financiamiento al terrorismo”.
Pero, además, la policía se refiere a Karen, su esposo e hijo como “apátridas”, en una clara señal de que les retiró la nacionalidad nicaragüense como lo ha hecho con cientos de personas consideradas opositoras.
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Otra franquicia con movimiento es Miss México: la propietaria de Miss Universo, Anne Jakrajutatip, le quitó los derechos a Lupita Jones, quien los tuvo por espacio de tres décadas.
La tailandesa anunció que la nueva directora de Miss Universe México es Cynthia de la Vega.
