Allan Arroyo
La Banda Municipal de Zarcero mantuvo la atención del todo el país en la última semana al representar por segunda vez a Costa Rica en el tradicional Desfile de las Rosas en Pasadena, California, el pasado lunes 1 de enero.
Se llevó todos los aplausos al ser la única banda latinoamericana en el evento mundial de Año Nuevo y ser catalogada como la mejor en el BandFest, un evento de presentación previo al desfile.
Por otra parte, la Banda Municipal de La Fortuna se presentará en el Desfile de Año Nuevo 2025 de Londres, Inglaterra. Justamente trabaja en este momento para consolidar el apoyo económico y garantizar su viaje a ese país europeo.
Banda Municipal de La Fortuna en Festival de la Luz 2023. (Cortesía Municipalidad de San José)
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Además, si hacemos un repaso al pasado recordamos a la Banda Municipal de Acosta que destacó en el Desfile de las Rosas 2019 y la Municipal Café Tarrazú como protagonista del evento de la Hispanidad en Nueva York, un año antes.
Cuatro ejemplos que representan el auge de las bandas de marcha costarricenses y la exposición internacional de los últimos años; todo con talento nacional de todas las edades, pero en su mayoría jóvenes.
Banda Municipal de Acosta en Festival de la Luz 2023. (Cortesía Municipalidad de San José)
El Ministerio de Cultura contabiliza más de 20 bandas comunales, municipales, de colegios diurnos, nocturnos, técnicos profesionales, entre otros, debidamente formadas y consolidadas.
Ante consulta de El Observador, desde esa cartera destacan que “principalmente en la década de los años 2000 se han creado bandas que han crecido y se han fortalecido como la Banda Municipal de Acosta, Banda de Orotina, Banda de La Fortuna, Banda de Tarrazú y la Banda Municipal de Zarcero”.
“Estas Bandas han tenido ya participaciones internacionales importantes, en Festival de La Luz y en festivales locales, así como en eventos nacionales por todo el país”, agrega Cultura.
Efecto Festival de la Luz
Los expertos y conocedores de la música nacional coinciden en que un gran impulso para estos grupos es el Festival de la Luz en en San José, como el evento cumbre del año al que desean llegar y por el que trabajan tantos meses.
Esa es la cita con la que algunas bandas lograron el impulso internacional y el formato de evento que otras zonas del país también desarrollan cada diciembre.
Banda Colegio Cedes Don Bosco en Festival de la luz 2023 (Cortesía Municipalidad de San José)
Jorge Villalobos, el principal responsable del Festival de la Luz de San José, acepta que esa es la meta de los directores y músicos.
“Como los directores lo reconocen en realidad, la gran ilusión de las bandas acá es venir el Festival de la Luz y para eso se preparan porque ese es su gran escenario (…) yo sí me atrevería a decir que el Festival de la Luz ha sido el gran detonante o motivante en la creación de las bandas en nuestro país”, enfatiza el representante de la Municipalidad de San José.
En la última edición, el pasado 16 de diciembre, participaron 15 pero, en el año, unas 30 asistieron a las audiciones .
Villalobos explica que los requisitos son altos y van más allá de solo el repertorio musical; se busca espectáculo con las coreografías, vestuarios y otros elementos para un show inspirado en los grandes eventos del mundo.
Esa es la principal característica de las bandas de marcha que surgen en Estados Unidos para eventos deportivos: el desarrollo de una presentación que va más allá de la buena ejecución musical.
“Nosotros hemos sido muy exigentes como organización con las bandas y creo que esa exigencia es lo que ha logrado el éxito de la disciplina, que las bandas se se vean obligadas a presentar un buen espectáculo musical”, considera Villalobos.
Banda de Zarcero se despidió en el Festival de la Luz 2023 para viajar a California y participar del Desfile de las Rosas el 1 de enero. (Cortesía Municipalidad de San José)
“Hacer algo diferente”
Para Elesban Rodríguez, director de la Banda de Zarcero, Costa Rica siempre ha tenido buenas bandas, pero el auge inicia cuando se empieza a salir del país a los grandes eventos mundiales donde se hacen más mediáticas y visibles.
En declaraciones a El Observador desde California, días después del Desfile de las Rosas, el exitoso músico recuerda grupos que ya no están vigentes, como la Banda de Palmares, y otros que evolucionaron y mantienen su alta calidad como Orotina y Acosta.
Al consultarle sobre el secreto del éxito fuera de Costa Rica, no duda en afirmar la necesidad de “hacer cosas diferentes”.
“Llevar ritmos diferentes, llevar lo nuestro también obviamente sin dejarlo de lado, pero no mostrar solo el género ‘marching’ porque sí vamos a Estados Unidos, todo mundo tiene que llevar este género”, afirma Rodríguez.
Banda de Zarcero en el Desfile de las Rosas 2024. (Tomado de Facebook oficial de Banda Municipal de Zarcero)
Con la experiencia en el Desfile de las Rosas, el director de la Banda de Zarcero reconoce lo indispensable de combinar buena música con la presentación visual.
“Mostrar nuestra música folclórica y también mostrar lo que somos: latinos, somos latinos, no somos ‘marching’. Es el género porque marchan pero en realidad nosotros quisimos hacer un híbrido”, explicó.
Zarcero destacó en California con la música costarricense, el ritmo latino y la representación de la cultura indígena Boruca. La banda tuvo presentaciones en Disney, el Muelle de Santa Mónica y el Desfile de las Rosas.
Después de la gran presentación de este año, la banda nacional tiene invitaciones para presentarse en Japón y en Hawai, Estados Unidos, además de participar en las audiciones para el Desfile de las Rosas del 2028.
Impulso municipal
Las bandas más consolidadas en Costa Rica, y con experiencia fueras del país logran alianzas con la empresa privada como patrocinadores, pero el inicio fue 100% local.
Por ello, las municipales tiene un rol importante en invertir e impulsar la cultura y este tipo de agrupaciones. Conforme se desarrollan y ganan experiencia y renombre, llegan otros aliados comerciales, primero comunales y luego nacionales.
Inclusive, bandas como la de San José, Garabito o Nicoya se sostienen solo con fondos de los gobiernos locales, mientras otras como Orotina y la Mercedes de Heredia tienen un componente de apoyo que surge desde la misma comunidad, explica Jorge Villalobos, productor del Festival de la Luz.
“Hay varios mecanismos de mantener las bandas: unas con el apoyo de la comunidad, o el apoyo nada más del municipio o el apoyo en conjunto con la comunidad, municipio o un tripartito: comunidad, municipio y algún sector o alguna institución del sector privado. Pero aquí lo importante es que el eje central de todas las bandas han sido las alcaldías” reflexiona.
Banda Municipal de Garabito en Festival de la Luz 2023. (Cortesía Municipalidad de San José)
En su rol, ha conversado con grandes municipios, como los cantones centrales de Alajuela, Cartago y Heredia, para que impulsen sus propias bandas. En el contexto social y de aumento de violencia que vive el país, esta puede ser una inversión de impacto y prevención.
El llamado de atención llega también a un mes de las elecciones municipales del 4 de febrero, en las cuales los 84 cantones de Costa Rica eligen a sus autoridades.
“La inversión que hagan los Consejos Municipales y las alcaldías para tener una banda es en beneficio de los jóvenes de su comunidad”, reflexiona Jorge Villalobos.
“El que ustedes tengan banda en su comunidad es que un grupo de jóvenes, en lugar de estar en las drogas o la delincuencia, los tienen en algo sano que es trabajando dentro de la cultura”, agrega.
El Ministerio de Cultura informó que con la Banda de Zarcero se colaboró en coordinar con Marca País para la distinción de Embajadores Esencial Costa Rica; la distinción de Diplomacia Cultural con Cancillería, el enlace con patrocinadores y la gestión de comunicación y espacios en medios.
Los integrantes del grupo buscaron los recursos, hasta con ventas de comidas y actividades comunales como los bingos, para costearse los gastos del viaje, además del apoyo de patrocinadores como empresas estatales y privadas.
