Katherine Ulate A.
Hoy, viernes, el Hospital Nacional de Niños (HNN), el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA) activó la campaña “Prevengamos las mordeduras de perros”, que tiene como objetivo disminuir los casos de mordeduras de caninos entre la población infantil del país.
De acuerdo con datos del HNN, en el 2018 se registraron 152 casos atendidos en emergencias.
“La cifras por mordeduras de perros nos preocupan ya que es un indicador de que hace falta educar en temas de tenencia responsable, por esto la importancia del trabajo conjunto con instituciones como SENASA y PANI. Además, se está trabajando en la creación de una directriz para la creación de una Comisión de Atención, Análisis y Prevención de Mordeduras de Caninos a Niños”, indicó Carlos Jiménez Herrera, director general a.i del Hospital Nacional de Niños.
Jiménez explicó que en el 2018, 26 casos fueron hospitalizados por la gravedad de las lesiones ya que la mayoría se presentaron, principalmente, en cabeza, cara y cuello. Esto implicó cirugías, reconstrucción con colgajos, reducción de fracturas faciales, cobertura antibiótica y una larga estancia hospitalaria.
Cinthya Mora, jefe del Servicio de Cirugía Reconstructiva del HNN, aseguró que en estos siete meses que lleva en curso el 2019 se han contabilizado 10 menores víctimas de ataques de caninos. En estos casos se necesitó la intervención del equipo interdisciplinario de profesionales como especialistas en cirugía reconstructiva, maxilofacial, oftalmología, trabajo social y psiquiatría, entre otros.
Padres y tutores: guías responsables
Las principales víctimas de mordeduras de perros son niñas y niños entre 1 y 9 años de edad, por lo que la campaña trata de guiar a padres y cuidadores sobre cómo enseñarles a establecer relaciones seguras y de respeto con los animales.
“Es importante que los padres y madres aseguren una tenencia responsable de sus mascotas, estas deben tener buena alimentación, agua, cuidados veterinarios adecuados, afecto y un lugar seguro, donde el animal mantenga un comportamiento normal”, explicó Federico Chaverri, Subdirector del SENASA.
La mayoría de mordeduras en menores de edad, suelen ocurrir en los mismos hogares donde los niños conviven con mascotas.
Chaverri aseveró que el 80% del comportamiento del animal es una conducta adquirida. Es decir, que los ataques no están relacionados con razas y tamaños del canino, sino con las condiciones y el trato al que el animal está frecuentemente sometido.
“Las niñas y los niños suelen repetir las acciones de sus padres y por esta razón, es importante que sean ellos los primeros en entender su rol como modelo y, por ende, enseñen a sus hijas e hijos con el ejemplo a cómo relacionarse sanamente con los perros, evitando acciones de riesgo”, aseguró Patricia Vega, presidenta ejecutiva del PANI.
Katherine Ulate A.
Mi curiosidad nació en la música, se desarrolló entre palabras y se alimenta de los acontecimientos. Siempre hay algo que decir, algo que escuchar, algo que informar, pero, sobre todo, algo que cuestionar.
