Mariana Mena
El Área de Conservación Guanacaste (ACG) investigará el caso del mono que se robó una fruta de un local comercial en La Cruz de Guanacaste.
Esta semana en redes sociales circuló el video de un mono araña que sale del supermercado con un banano en la mano.
Las imágenes generaron diversas reacciones entre los presentes y espectadores, pero para los expertos no es un comportamiento normal de la especie.
“Desde el ACG se realizarán las acciones para abordar este tipo de interacciones negativas entre la fauna silvestre, los pobladores y los establecimientos comerciales aledaños al Parque Central y el Mirador turístico de esa localidad”, informó la organización.
Para los especialistas, el fin es reducir las amenazas para la salud pública, prevenir accidentes y propiciar el bienestar de los animales.
“Además, para abordar esta situación, los funcionarios del Área de Conservación realizarán inspecciones de campo para determinar las causas de este comportamiento atípico de la especie”, indicaron.
A su vez, la institución coordinará reuniones con la Municipalidad de La Cruz, Instituciones del Estado, Organizaciones no gubernamentales, comerciantes y asociaciones comunales para abordar de forma conjunta e integral la interacción que se está presentando en la localidad.
No alimentar animales silvestres
La Ley de Conservación Vida Silvestre prohíbe la alimentación a la fauna silvestre y quien lo realice deberá de cancelar una multa de hasta ¢140.000.
“Se buscarán recursos económicos para la colocación de rótulos de no alimentar a la fauna silvestre y se trabajará en un proceso de sensibilización de los pobladores para evitar la alimentación de los animales silvestres”, señaló la ACG.
El llamado a los vecinos del centro del cantón de La Cruz es para que eviten la alimentación de animales como monos, pizotes, garrobos, aves, entre otros.
“Asimismo estas prácticas representan un posible problema para la salud humana, por la transmisión de enfermedades de los animales hacia el ser humano y viceversa. También posibles ataques que pueden culminar en mordeduras, amputaciones o rasguños”, advierten.
“También la alimentación de la fauna silvestre por el ser humano, rompe la cadena alimenticia y los animales dejan de cumplir su función ecológica como dispersores de semillas, controladores de insectos, polinizadores y otras funciones primordiales para el sano funcionamiento de los ecosistemas naturales”, sumó la ACG.
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Problemas para los animales
El brindar alimentación a la fauna silvestre genera desequilibrios alimenticios provocándoles:
- Caída de pelaje y dientes
- Desnutrición
- Obesidad
- Cáncer
Provoca cambios en los comportamientos naturales de la fauna silvestre lo que desencadena:
- Ansiedad
- Estrés
- Agresividad
- Dependencia
- Falta de temor al ser humano
“Los animales silvestres al perder el temor al ser humano pueden generan daños a la infraestructura, hurto de pertenencias, existe un mayor riesgo de atropellos, electrocuciones, ataques de perros o contagios de enfermedades como sarna, además de que existe una mayor probabilidad de cacería o tráfico de vida silvestre por la zona fronteriza”, resaltó la Organización.
