Paula Ruiz
El Ministerio de Educación Pública (MEP), se comprometió con los sindicatos de este sector para mediar con autoridades sanitarias con el fin de concretar una reunión que les permita plantear su queja de la vacunación.
Los gremios sindicales abogan para que los educadores sean vacunados antes del inicio del curso lectivo presencial que inicia el 8 de febrero próximo.
Sin embargo, no forman parte del cuarto grupo prioritario de vacunación que hasta el momento apenas está abarcando al primer grupo.
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El acuerdo del MEP con sindicatos se concretó este martes durante una reunión de ambas partes.
“Durante la reunión se tomaron acuerdos para que, por mediación del MEP, los sindicatos puedan reunirse con la Comisión Nacional de Vacunación y con autoridades del Ministerio de Salud y de la CCSS, con el fin de plantear, a las autoridades sanitarias, la preocupación del Sector Docente acerca de la prioridad que le correspondió a esta población laboral en el programa de vacunación”, informó el MEP.
Adicionalmente, autoridades ministeriales se reunirán con Caja de Ande, Sociedad de Vida del Magisterio y la Junta de Pensiones del Magisterio (Jupema) con el fin de explorar un apoyo económico de estas organizaciones que permita a sus afiliados la compra de la vacuna.
Jerarca del MEP se reunió con líderes sindicales donde se trató el tema de vacunación de educadores. Cortesía MEP.
Regreso inminente
El 7 de enero anterior, el Sindicato de la Educación Costarricense (SEC) rechazó el inicio del curso lectivo presencial, a menos que se vacune a todos los docentes.
Pero, al día siguiente, la ministra de Educación, Guiselle Cruz, advirtió que eso no era posible.
Desde el Congreso, las diputadas Floria Segreda y Franggi Nicolás, han solicitado por aparte, la vacunación de docentes para el inicio de clases.
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Durante el encuentro de este martes, Cruz reforzó la idea de un retorno progresivo, así como controlado y seguro.
La ministra resaltó que la presencialidad es “impostergable, principalmente por la necesidad de atender el rezago en los contenidos de los programas educativos que afecta a la totalidad de la población estudiantil del país”.
Adicionalmente, le explicó a los líderes gremiales que la suspensión de clases presenciales en el aula, ha provocado la pérdida de interacción social entre estudiantes y docentes.
“Lo que podría traducirse en dificultades socioemocionales que no solo afectan su rendimiento escolar, sino sus posibilidades futuras de relacionamiento social y eventualmente, podría causar daño en la salud mental de niños, niñas y jóvenes”, agregó.
Los representantes gremiales en el encuentro fueron: Gilberto Cascante por ANDE, Gilberth Díaz del SEC, Zaray Esquivel de Apse y Rosario Ruiz del sindicato de trabajadoras de comedores escolares.
