Transporte, nuestro talón de Aquiles en la lucha contra el cambio climático

El planeta está sumido en una crisis ambiental y los expertos aseguran que si no se actúa ya, el 2050 pinta que será una época sombría para la humanidad.

El cambio climático ya no solo acapara la atención del sector científico, si no que los gobiernos de todo el mundo lo han incluido como un eje en sus políticas públicas para poder hacerle frente.

En el 2010, Costa Rica creó la Dirección de Cambio Climático, adscrito al Ministerio de Ambiente y Energía, para la construcción de capacidades para la mitigación y adaptación ante este fenómeno.

El Observador conversó con Andrea Meza, directora de la Dirección, acerca de cómo avanza Costa Rica en el tema y cuales son las principales debilidades.

“El cambio climático es posiblemente la peor amenaza que está enfrentando la humanidad y la economía global”, dijo Meza al inicio de la entrevista.

-¿En dónde estamos? ¿Como camina Costa Rica contra el Cambio Climático?

Si nos hicieran una evaluación, estamos como regular. El reto es grande, pero no estamos tan mal como algunos quieren hacernos pensar.

Tenemos una electricidad que es muy renovable, eso es muy importante porque es una ventaja competitiva. Tenemos un país que ha logrado parar la deforestación acelerada.

Estas dos fuentes de emisiones, matrices eléctricas muy carbonizadas y la deforestación, son de las mayores fuentes de emisiones a nivel global y nosotros ahí tenemos la tarea resuelta.

Pero seguimos siendo muy dependientes de la energía que viene de los hidrocarburos, especialmente en el sector transporte. Ahí tenemos un reto enorme.

-¿Qué retos tiene el país por delante en su lucha contra el cambio climático?

Hay que hablar de la descarbonización, de la digitalización y de la descentralización de la producción energética; son cambios que vienen y que el país puede sacarle provecho y generar mayor bienestar y riqueza.

Tenemos que poner la economía circular con mucha más agresividad. Los residuos están siendo una fuente de emisiones importante, especialmente los residuos orgánicos.

Tenemos que seguir transformando y modernizando nuestro sistema agropecuario, con tecnologías más eficientes y ecocompetitivas.

Por un lado, están los eventos meteorológicos extremos que lo que nos dice la ciencia es que se van a intensificar. Y por otro, está la oportunidad de cambiar la economía para que la nueva fuente de energía de la economía no sean los hidrocarburos.

Por eso estamos con un plan de largo plazo. el Plan de Descarbonización para el 2050, que tiene una meta de ser emisiones neta cero y que abarca toda la economía.

-El tema de movilidad parece ir lento…

Urge ser mucho más agresivos en el proceso de transformar las ciudades, a ciudades más compactas de usos mixtos, a usar más el transporte público y el transporte no motorizado, y a electrificar el transporte.

Los indicadores de aire cada vez van peor y no hay manera de que eso se revierta si no hacemos cambios profundos en movilidad. 

Por ejemplo, carros eléctricos. La tecnología ya está. Hace 10 años me hubieran dicho que eso era inviable, pero hoy ya sabemos que eso es a lo que vamos. 

-¿De quién es la tarea de alcanzar las metas del país en el tema ambiental?

El Estado en su rol define políticas públicas, o sea una visión y grandes metas hacia donde queremos ir. Y va haciendo que el marco legal y de incentivos se alinee y sea coherente con esas metas.

Pero, ¿quiénes hacen innovación? el sector privado, la academia, los grupos organizados y los ciudadanos desde sus distintos roles.

Necesitamos gente que quiera vivir diferente, que se anime a vivir otra vez en la ciudad, cerca del trabajo, a moverse en tren y en bici.

Es un tema de cada uno empezando a tomar decisiones conscientes, porque cada decisión en consumo y producción cuenta. También tiene que ser parte de lo que piensan los tomadores de decisiones de más alto nivel en las empresas.

La sociedad civil es la que va a garantizar que esto ya es un compromiso país, no importa el cambio de partido político que llegue.

-¿Y la meta de carbono neutralidad para el 2021? ¿Se logrará?

Es una política que nos ha dado mucho aprendizaje, muchas enseñanzas y que nos ha preparado para tomar las decisiones que estamos tomando ahorita.

Yo no creo que tuviésemos un plan de descarbonización si no hubiéramos lanzado la carbono neutralidad. Son acciones preparatorias que nos van dando y generando apropiación y sensibilización.

Hay que hacer una medición en el año 2021, las mediciones ahorita dicen que vamos bien en el avance de cosas como energía renovable.

Agricultura es un sector que se ha puesto la camiseta y viene haciendo cosas novedosas, y las agendas en café y ganadería son interesantes y van con avances.

Pero vamos mal, con rezago importante, en el tema de transporte. Sin embargo, con la aprobación de la ley de incentivos a la movilidad eléctrica, con el foco que se está dando al tren eléctrico, son ajustes importantes que van a transformar los esquemas.

-¿Alcanzaremos la meta?

Creo que no. Pero no vamos a estar tan lejos. Vamos a ver que dicen las mediciones.