Paula Ruiz
Bernon Brown, de 50 años, era capaz de quitarse el pan de su boca, con tal de que sus hijos tuvieran los mejores estudios.
Por eso, cuando se enteró que una de sus hijas ganó una beca para estudiar Medicina en el extranjero, él hizo rifas durante un año, vendió varios cuadros que tenía en su casa y ahorró todo lo que pudo para poder sufragar los gastos.
Este padre hizo ese esfuerzo para que su hija cursara la carrera en Rusia, porque no quería que desaprovechara la oportunidad.
Brown, de 50 años, era un ingeniero industrial. Uno de los pasajeros que estaba en el autobús de la empresa Alfaro y es una de las víctimas del fatídico accidente registrado la tarde del sábado.
Junto a él viajaba su hijo menor de 12 años, quien se encuentra hospitalizado tras una intervención quirúrgica de emergencia.
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Jéssica Tenorio Johnson, es una sobrina de Brown. Ella estaba el domingo en el Complejo de Ciencias Forenses del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y accedió a relatar la historia de su tío.
Aún no tiene claridad si venía de San José por el asunto del alquiler de una vivienda en Aserrí o si también, aprovechó para ir a despedir a su hija en el aeropuerto Juan Santamaría. Justamente, la que viajaba hacia Rusia para estudiar en medicina.
“Mi prima, de hecho no ha llegado a Rusia (…) ella ya sabe, está intentado cómo devolverse”, afirmó Tenorio.
“Como un papá para mí”
Jéssica estaba sentada en la parada de autobús junto a su esposo la tarde de este domingo, a unos metros de distancia de la entrada principal.
No se despegaba del teléfono para poder comunicarse con su tía, quien es la esposa de Bernon. Sus lágrimas lo describían todo.
Para Jéssica, don Bernon era como un papá, era una persona especial, dedicada a su familia, alguien alegre.
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“Somos una familia no muy grande, una familia pequeña. Mi tío era como el papá de nosotros, deja un niño y dos muchachas, nadie lo esperaba. Era una persona sumamente alegre, especial… era como mi papá, siempre estuvo ahí para nosotros porque hemos pasado situaciones difíciles, pero siempre estuvo presente como papá, como hermano, como hijo. Siempre fue estudioso, responsable, le costó mucho sacar sus estudios; a sus hijos les dio el estudio, mis primas son muy estudiadas”, destacó Tenorio.
“Él se quitaba el pan de la boca por pagarles los estudios a mis primos”, confesó.
“No nos dejaba pagar hotel”
Bernon era tan especial, que cada fin y principio de año, invitaba a toda la familia a estar en su casa en Nicoya.
En su vivienda recibía a todos sus sobrinos, hermanos y familiares para que disfrutaran de las vacaciones en Guanacaste, dado que viven en el Valle Central.
“No nos dejaba pagar hotel, era en la casa de él, en reuniones familiares. Le encantaba que fuéramos todos los de la familia”, recordó Tenorio, quien vive en San Rafael de Heredia.
“Era el alma de la fiesta”, agregó su sobrina.
Tenorio contó que su tío les recomendó viajar en la ruta por Cambronero porque el tiquete salía más económico.
Jéssica confesó que se enteraron de la tragedia por las noticias, pero guardaban la esperanza de que estuviera con vida.
Bernon era jefe de hogar, por lo cual, la familia ahora tendrá que hacer frente a aspectos económicos. Si desea colaborar, puede comunicarse con Jéssica al teléfono 6179-9829.
