Rodrigo Díaz
Los empresarios del sector azucarero, representados en la Liga Agrícola Industrial de la Caña (LAICA) aseguraron que están en capacidad de satisfacer toda la demanda nacional de alcohol.
Así lo señalaron en un comunicado de prensa emitido este lunes, horas después de que el sector industrial y alimentario señaló que los faltantes del alcohol que les provee la Fábrica Nacional de Licores (Fanal) pone en riesgo la operación de muchas empresas y amenaza con la pérdida de miles de empleos.
Además de la fabricación de licores y alcohol como desinfectante, este producto se requiere para la elaboración de diversos productos.
Suficiente y más
Laica aseguró que la industria produce anualmente 52 millones de litros de alcohol. Esta cantidad no solo es suficiente, sino que sobrepasa las necesidades de alcohol del país.
Para el año 2021, Laica vendió a FANAL 13 millones de litros y se exportaron 39 millones.
“Debido a lo anterior, no podemos señalar que haya desabastecimiento de alcohol en Costa Rica”, señaló Laica en un comunicado.
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El ente explicó que provee a Fanal del alcohol que le solicita. Los pedidos normalmente se hacen al comenzar el año.
Ante la emergencia sanitaria por el covid-19, “la demanda de alcohol prácticamente se duplicó y Laica le entregó a Fanal todo el producto que solicitó”, detalló en el comunicado.
De acuerdo con Laica, el sector cañero-azucarero costarricense está compuesto por 6.364 productores independientes. El 97,7% son medianos y pequeños con fincas de menos de 20 hectáreas. En el país existen 12 ingenios azucareros y 2 de ellos son cooperativas.
Fanal señalado
Los industriales señalaron que el pasado 12 de enero se les informó que las cuotas de alcohol para las empresas o industrias podrían verse disminuidas en 2022.
Ante ello, se pone en riesgo la operación de muchas empresas y amenaza con la pérdida de miles de empleos.
Es por eso que las cámaras empresariales se unieron para pedir al gobierno una serie de medidas para poder adquirir el alcohol directamente a los productores y no mediante intermediarios.
“Necesitamos que nos vendan directamente quienes producen el alcohol”, dijo Enrique Egloff, presidente de la Cámara de Industrias.
“Dos cosas: o Fanal nos sigue vendiendo o que el gobierno intervenga y que Laica nos venda directamente el alcohol, porque hay suficiente en Costa Rica”, dijo por su parte Alejandro Sibaja, segundo vicepresidente de la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria.
Maurizio Musmanni, presidente de CACIA, indicó que ya hicieron requerimientos ante el Ministerio de Economía.
“De manera proactiva le hemos planteado al Ministerio de Economía, Industria y Comercio algunas opciones legalmente viables que permitan a la industria disponer del alcohol en el corto plazo, para evitar el cierre de operaciones y reducción de la producción nacional de bienes finales de valor agregado”.
Anunció reducción
El 5 de enero la Fábrica Nacional de Licores (Fanal) se comunicó con sus clientes para darles a conocer un oficio del 23 de diciembre en el que informó que las cantidades de licores y alcohol disponibles para la venta tendrían una reducción sustancial.
Esta medida se toma debido a disposiciones del gobierno y la aplicación de la regla fiscal a la que Fanal, empresa subsidiaria del Consejo Nacional de Producción (CNP) está sujeto.
Según la comunicación, la reducción mensual de la venta de los productos busca garantizar la disponibilidad de licores y alcoholes a lo largo del año.
Sin embargo, El Observador tiene información de que en agosto Fanal dejaría de vender alcohol.
Para las cámaras, lo que está haciendo Fanal es generar una medida de presión para que lo excluyan de la regla fiscal.
El año anterior, Fanal tuvo también un faltante presupuestario por la aplicación de dicha normativa, por lo que pidió, a través del CNP, que se le autorizara una excepción y así comprar más alcohol.
Por ley, el Estado tiene el monopolio del alcohol. De este modo, solo Fanal puede comprarlo a los productores y distribuirlo a las empresas.
Según varios empresarios, esta intermediación no solo encarece el proceso sino también provocará incumplimientos para la demanda de sus clientes.
El desabastecimiento de alcohol generaría una reducción en las ventas de las empresas en general, lo que llevaría a un porcentaje importante de desempleo, advirtieron.
Según Egloff, lo que se vería afectado ante el desabastecimiento informado por Fanal serían los alimentos, bebidas, productos de higiene, medicamentos, agroquímicos y otros más.
“Están incentivando el contrabando y el comercio ilícito”, señaló Egloff.
Rodrigo Díaz
