Krissia Morris Gray
El robo de medidores de luz a clientes de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) se disparó de manera considerable en el 2021. Solo de julio a diciembre se contabilizaron 400 sustracciones.
Esto representó un gasto para la CNFL entre los ¢48 millones y ¢52 millones.
La entidad no aportó las cifras del primer trimestre del año pasado. Con respecto a todo el 2020, la CNFL contabilizó 120 sustracciones.
Adán Marchena, subdirector de Comercialización de la CNFL, comentó que para enero del 2022, se registra el robo de un medidor.
El funcionario aseguró que se trata de tanto medidores inteligentes como convencionales.
Los lugares donde más robo de medidores reportan son:
- Hatillo
- San Sebastián
- Paso Ancho
- San José (en los lugares: centro de San José, Catedral, Merced, Barrio Cuba y Barrio Los Ángeles)
OBSERVE MÁS: Robo de cable, medidores, tornillos y línea férrea deja pérdidas millonarias al Estado
En chatarreras y charrales
El funcionario comentó que miembros de la CNFL acompañaron a las autoridades judiciales en allanamientos a chatarreras. Esto para la identificación de bienes que, al final, fueron recuperados.
Al mismo tiempo, contó que hubo medidores robados que los delincuentes lanzaron a charrales.
“Son medidores que, lastimosamente, un vándalo los roba creyendo que tienen muchos componentes metálicos o que sean sujetos de reciclaje.
“Lastimosamente para ellos no es así, porque la gran mayoría de medidores que tenemos, hoy por hoy instalados, tienen muchos componentes plásticos y electrónicos”, explicó Marchena.
En este sentido aseveró que “es ínfimo” lo que se puede usar para reciclaje.
Entre ¢48 millones y ¢52 millones
Marchena recordó que cuando ocurre el robo de un medidor hay una afectación a los abonados.
Detalló que la instancia tiene cuadrillas, para la reparación de las averías y para hacer las sustituciones 24/7 y durante todo el año.
Marchena aseveró que las sustituciones de los medidores son asumidas por la CNFL así como su instalación y no los clientes.
“El costo de sustituir los 400 medidores le costó a la CNFL entre ¢15 millones y ¢16 millones. La mano de obra, para reinstalar los medidores y hacer el condicionamiento técnico, va entre ¢35 millones y ¢36 millones”, detalló Marchena.
Con esto, sumando los costos, representaron un gasto a la CNFL entre los ¢48 millones y ¢52 millones entre julio a diciembre del 2021.
El costo promedio de cada medidor ronda los $60.
Las personas afectadas pueden reportar el caso al 1026.
OBSERVE MÁS: Mal estado de medidores de AyA causa pérdidas de casi ¢585 millones al año
2.541 denuncias
El robo de materiales a instituciones del Estado como el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer) o CNFL dejó pérdidas millonarias en el 2021.
Cable telefónico, medidores de electricidad, líneas férreas y tornillos de las mismas líneas por donde pasa el tren son los materiales más apetecidos por la delincuencia.
Así lo dio a conocer el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que en 2021 recibió 2.541 denuncias por este delito.
Esta falta la cometen delincuentes comunes, pero también bandas organizadas.
Las autoridades judiciales son claras en que el daño que provocan estos hurtos va más allá de las piezas que se llevan.
Hay afectación en el sistema telefónico y de Internet en muchas de las zonas, que han generado crisis incluso en hospitales.
“El ICE es de las instituciones más afectadas con ese tema. Durante el año pasado las pérdidas económicas fueron de más de 5.000 millones de colones”, explicó Douglas Rodríguez, subjefe de la sección de hurtos del OIJ.
En todo el 2021 se robaron 88.000 metros de cable a lo largo y ancho del país.
Krissia Morris Gray
