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Mario Varela para El Observador
Leyendo el artículo escrito por Jessica H. Jones en la Revista Harvard Business Review, del cual soy suscriptor, existen varias técnicas de cómo los empleadores pueden ayudar en el proceso de evitar que los trabajadores se nieguen a ponerse las vacunas. Esto sería, obviamente siempre y cuando el Consejo de Salud Ocupacional del Ministerio de Trabajo no dictamine la obligatoriedad de la vacunación.
Aquí tenemos estas ideas que Jessica expone en su artículo, y yo le agrego dos al final.
“Las vacunas solo pueden poner fin a esta pandemia y prevenir aún más muertes y trastornos económicos si suficientes personas las reciben, lo que permite que un país logre la inmunidad colectiva. Los empleadores pueden desempeñar un papel fundamental en la consecución de ese objetivo si adoptan los principios de la economía del comportamiento para combatir las dudas sobre las vacunas.
Enfatiza las historias sobre las estadísticas
Los datos en muchas personas son trascendentes y esto puede dar un efecto importante para entender cómo todos somos propensos al contagio de esta enfermedad. Esto puede ser perjudicial y, sobre todo, puede ocasionar la muerte no solo del trabajador como tal, sino de su propia familia.
Jessica nos dice que es más probable que las personas crean que pueden enfermarse o infectar a otras personas después de escuchar que esto le sucedió a alguien que conocen personalmente.
Concéntrese en los beneficios inmediatos en lugar de a largo plazo
Las comunicaciones deben enfocarse en los beneficios inmediatos, como que aquellos que están vacunados pueden regresar a la tienda de comestibles o al peluquero con menos preocupaciones de que puedan llevar la infección a su familia.
Recalque que la vacunación será necesaria para algunas actividades
Las empresas tienen actividades importantes, que quizás con la pandemia no se siguieron dando. Pero si todos están vacunados, estas actividades que son gustadas por los trabajadores volverán. Esto los motivará para vacunarse.
Proteja a los empleados de cualquier pérdida asociada con la vacunación
De los permisos necesarios para que el trabajador se vacune, no rebaje este tiempo. Motive para que inclusive puedan tomarse, ya sean unas horas, o inclusive todo el día. Al final, el vacunarse es un beneficio para todos.
Usa las redes sociales
A los humanos les gusta hacer lo que hacen sus amigos y vecinos. Así que incentive el uso de las redes, en especial, cuando están siendo vacunados, esto ayuda y fomenta la vacunación.
Busque compromiso
Hay una razón por la que las campañas políticas piden a los votantes que firmen tarjetas comprometiéndose a votar o apoyar a un candidato.
Una vez que hemos declarado públicamente nuestra posición, somos más receptivos al sesgo de confirmación, lo que significa que buscamos información que confirme nuestro punto de vista y pasamos por alto la información que no lo hace.
Los empleadores deben alentar a sus empleados a que se inscriban para recibir las vacunas tan pronto como sean elegibles, incluso si hay una espera. Y los ejecutivos y otros líderes influyentes deben expresar su compromiso de vacunarse, incluso si aún no son elegibles.
Supere los sesgos
Muchos sesgos están en este momento sobre las vacunas. Las personas se protegen de sus sesgos si son atacados, por lo tanto, valídelos pero a su vez, fomente la crítica, el estudio, y el conocimiento para superar los sesgos alrededor de las vacunas.
Incentive premios en salario emocional a quienes se vacunen
Hay muchas estrategias de salario emocional, que fomentan el bienestar de los trabajadores, según sus necesidades e intereses. Averigüe qué les gusta a los trabajadores, y foménteles, a cambio de la vacuna, viajes a hoteles en la playa, congresos, etc.
La pandemia de covid-19 representa el mayor desafío de salud pública en un siglo. Para combatirlo, debemos aumentar la aceptación pública de las vacunas seguras y altamente efectivas.
Al utilizar el conjunto de herramientas económicas conductuales para promover la vacunación de los empleados y sus familias, los empleadores pueden ayudarnos a lograr la inmunidad colectiva y así prevenir más enfermedades, muertes y más trastornos económicos.
Usemos los conocimientos técnicos y expertos como la autora del artículo aquí desarrollado; pero no olvidemos que al final, las vacunas solo buscan la protección de todos, no solo la individual.
El Derecho Laboral puede proveer herramientas, pero primero usemos las herramientas aquí aconsejadas, antes de obligar coercitivamente a vacunar a los trabajadores. Al final, la voluntariedad de la vacunación, es exponencial, y nos ayuda a todos como país superar la pandemia.
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