Hermes Solano
La Asamblea Legislativa aprobó este jueves una moción para declarar el 30 de mayo como el Día Nacional de la Oración.
Con el apoyo de todas las fracciones, salvo la de Acción Ciudadana y el Frente Amplio, el bloque Nueva República fue el principal promotor de la idea, motivado por “las consecuencias sanitarias, económicas y sociales ocasionadas por el covid-19”.
Sin embargo, esto generó una gran cantidad de críticas por parte de varios diputados, principalmente los oficialistas.
En la discusión de la moción Paola Vega fue dura y se opuso a la moción. Ella aseguró que la Asamblea Legislativa no tiene injerencia en las creencias religiosas de la gente.
“La potestad y competencia de hacer un llamado a los costarricenses a orar le compete a líderes religiosos y no políticos”, dijo.
“Es irrespetuoso con los creyentes y personas que oran de buena fe hacer este tipo de charlatanería”, añadió.
Pedido a Silvia Hernández
Carolina Hidalgo se unió a su compañera de fracción al oponerse a esta designación e incluso ambas le pidieron a la presidenta del Congreso, Silvia Hernández, que no sometiera a votación la moción.
“No debe mezclarse la religión con el Congreso”, dijo.
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“Reconsidere poner esta moción a votación”, pidió Vega. “Quien dispone el debate es usted, las facultades constitucionales para ponerlo a votación o no las tiene usted como presidenta”, añadió Hidalgo.
Hernández, diputada del PLN y quien dirige el Congreso, respondió que hubo un acuerdo de Jefes de Fracción para llevar la moción al Plenario y votarla.
Este mismo jueves hubo reunión de los jefes de las bancadas, donde se discutió el tema. Pero finalmente tras revisar criterios técnicos y escuchar las propuestas, la presidenta legislativa acogió incluir la petición en los temas para la sesión de hoy.
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Violentando la libertad religiosa
Otro de los que estuvo y votó en contra fue el diputado del Frente Amplio, José María Villalta, quien aseguró que con este se está violentando la libertad religiosa de los costarricenses.
“Pueden rezar cuando quieren, convocarse y hacer sus jornadas de oración sin que venga la Asamblea Legislativa a hacer un llamado”, dijo el legislador, quien junto a varios diputados consideró que esto es un acto político más que religioso de cara a las elecciones de 2022.
“Se está violentando la libertad religiosa al permitir que la Asamblea Legislativa se meta en este tema”, añadió.
La votación fue de 25 a favor y 19 en contra, con lo que fue aprobada.
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Complacidos
Jonathan Prendas, diputado del bloque Nueva República, se mostró feliz por la aprobación e insta a todos los costarricenses a unirse en oración este domingo 30 de mayo, principalmente a raíz de la pandemia por el covid-19.
“Muy complacidos del resultado de la moción que se presentó con el apoyo de 30 diputados y que busca invitar a que el país se una en este momento por la pandemia”, dijo Prendas
“Necesitamos que Costa Rica vuelva a tener esperanza”, añadió.
El legislador indicó que ya se le informó a la Conferencia Episcopal y a la Alianza Evangélica para la coordinación con todas sus congregaciones y feligreses de cara a la celebración de este Día Nacional de la Oración.
El país ya tenía un día dedicado a esto. En enero de 2002, el entonces presidente de la República, Miguel Ángel Rodríguez decretó el 24 de enero como el Día Nacional de la Oración por la Paz y la Solidaridad.
Rodríguez lo estableció vía decreto luego de una reunión que sostuvo con líderes religiosos, uniéndose a la jornada internacional de oración por la paz, que fue convocada por el papa Juan Pablo II en aquel año.
