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Con un rótulo, dueño de restaurante lanza duro reclamo al Presidente Alvarado

La frustración y la preocupación hicieron que Alfredo Espinoza, dueño del negocio La Antojería Mexicana, lanzara un fuerte reclamo al…

Por Krissia Morris Gray

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Con un rótulo, dueño de restaurante lanza duro reclamo al Presidente Alvarado
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La frustración y la preocupación hicieron que Alfredo Espinoza, dueño del negocio La Antojería Mexicana, lanzara un fuerte reclamo al presidente de la República, Carlos Alvarado.

¿La razón? Las restricciones al comercio aplicadas con motivo del covid en la semana que recién termina.

En las afueras de su negocio, en Moravia, colocó un enorme banner, de color amarillo, en el que insta al mandatario cerrar todo.

Pero le pide que no le cobre impuesto de renta, impuesto de venta, los municipales, ni las cargas sociales “y así estamos a mano”.

“Entonces todos, tu familia, mi familia, tus empleados y mis empleados, todos nos cagamos juntos de hambre”, se desprende del banner de la protesta.

“El mensaje va dirigido a don Carlos por que el es capitán del barco”, contó Espinoza a El Observador.

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“Catastrófico”

Espinoza manifestó que la situación ha sido catastrófica para él, su familia y colaboradores.

“Me motivó la frustración que siento al llevar sobre mis espaldas el peso de mantener a mi familia sin estar generando los ingresos suficientes. Y, además, mandar a mis colaboradores con una suspensión de contrato, sabiendo que algunas cabezas de familia y que esta semana no tuvieron ingresos”, afirmó Espinoza.

A esto añadió la preocupación que tiene, pues pese a las medidas restrictivas aplicadas, las cuales afectan sus ingresos, debe cumplir con el pago de sus responsabilidades con el Estado, las cuales no se detienen.

Explicó que las medidas  restrictivas aplicadas por el gobierno son desiguales.

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“Esto no sólo me ha afectado a mi y a mi familia, también a mis colaboradores y proveedores. Ha sido económicamente catastrófico y emocionalmente devastador.

“Por que usted no se imagina lo duro que es sentar frente a usted una señora que tiene hijos que mantener y decirle que se vaya para la casa a esperar a ver que pasa.

“Las medidas las calificó como desiguales. Han sido y siguen siendo desiguales”, concluyó  Espinoza.

 

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