Tomás Gómez
Aunque una parte de las personas afectadas por la cancelación de tours y paseos debido a la pandemia de COVID-19 pide la devolución del dinero, las agencias de viajes se inclinan por la reprogramación de las actividades una vez que pase la crisis.
Según la Asociación Costarricense de Agencias de Viajes (ACAV), su labor es de intermediarios y el dinero no está en su poder sino en el proveedores de servicios como líneas aéreas, cruceros, hoteles o touroperadores, quienes también se han decantado por la reprogramación, cerrando las puertas a las devoluciones.
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“Por poner un ejemplo, en el caso específico de las líneas aéreas, están ofreciendo bonos para viajar en el futuro, pero el reintegro del importe pagado por el boleto no es una alternativa”, dijo la presidenta de ACAV, Sary Valverde.
La recomendación del gremio es emitir letras de crédito válidas por un año, para que el paquete sea aprovechado en otro momento en las mismas condiciones.
“Como Asociación hemos hecho un llamado responsable a las agencias de viajes a flexibilizar sus políticas de cambio de itinerario o cancelación, a mantener informados a sus clientes y a evitar penalizaciones en la medida de sus posibilidades. Por otro lado, solicitamos respetuosamente a aquellas personas que tienen viajes programados a posponerlos en lugar de cancelarlos, y disfrutar de ellos más adelante”, agregó Valverde.
Un sector en “temporada 0”
El sector turístico, posicionado por 30 años como uno de los principales negocios del país está siendo el más golpeado por los efectos económicos de la pandemia.
El cierre de fronteras y la mala situación de otras naciones afecta los servicios internacionales y el distanciamiento social y la restricción vehicular golpea en el caso del turismo nacional.
Empresarios del sector hablan de que no están en temporada bajo sino en “temporada cero”, sin un solo ingreso, lo que compromete al menos 200.000 empleos.
