Tomás Gómez
Isabella es la bebé prematura a la que se le negó la atención en el Hospital de Nicoya y este miércoles su mamá, Angie Herrera, amplió la denuncia de todos los problemas que enfrentó en el nacimiento de la hija a quien define como un milagro.
En primer lugar explicó que no podía tener hijos, por lo que toda la familia tenía la emoción de recibir a la niña.
Los sentimientos de esperanza, sin embargo, se complicaron luego de que la bebé naciera con apenas 26 semanas de gestación y en vez de atenderla, el hospital optara por dársela a la madre mientras fallecía.
En ese momento, un video de Herrera en redes sociales se viralizó y su llamado para que atendieran a su hija tuvo eco en la población y en las autoridades de la Caja que trasladaron a la niña al hospital de Puntarenas.
Ante todo ello, Herrera anunció que tomará acciones legales contra el centro médico en Nicoya por negligencia.
“El Hospital de Nicoya es un chiste, le queda grande la palabra”, sostuvo la mujer en una conferencia brindada este miércoles.
Una de las principales denuncias que hizo fue que, incluso, la funcionaria que la atendía le ofreció inyectar a la bebé para “que se durmiera tranquilita”, a lo que ella no accedió.
“No permití porque yo sabía que mi bebé en ese estado lo que más tenía que estar era más despierta que nunca. Estarla moviendo y así para que ella llorara y sus pulmoncitos fueran agarrando fuerza, pero ella prácticamente lo que quería era sedarme a la bebé para que se muriera más rápido”, detalló.
Mala fama y un video revelador
Herrera detalló que en la comunidad ya hay mala fama por la atención del centro médico, experiencia que le tocó vivir en carne propia.
Su historia se dio a conocer gracias a un video donde contaba su angustiante situación y ahí la atención fue cambiando.
“Yo subí el video y me imagino que dentro de una hora ya se habría corrido la bola en todo el hospital. Llegaron dos pediatras y un psicólogo a decirme y explicarme lo que ya todos me habían dicho: que la bebé no se podía sacar, de todo me dijeron”, recordó.
“Yo simplemente les dije si mi bebé se muere, ustedes se van de aquí todos embarrados”, contestó.
La preocupación incluyó que nisiquiera se ofreciera una incubadora porque supuestamente no habían en el hospital nicoyano.
“Lo que dijeron fue que no le podían poner oxígeno porque la bebé no iba a aguantar, el oxígeno no le iba a servir de nada y que ellos no tenían ese tipo de mobiliario. Lo que me impactó a mi al día siguiente cuando me dijeron denos la bebé para llevarla a la incubadora.
Fueron en total 18 horas que la mamá estuvo con la bebé hasta que por fin se la llevaron.
Mensajes para doctores y mamás
Doña Angie indicó que no dará más declaraciones a la prensa para enfocarse en su hija, pero antes dejó varios mensajes.
Para las mamás, en primer lugar, las llamó a no guardar silencio.
“Lo único que le puedo decir a las madres de Costa Rica es que no se quedan calladas. Que ante una situación de esas, peleen con uñas y con dientes porque es una vida, por un hijo uno hace lo que sea”, anotó.
Para quienes trabajan en el sector Salud, resaltó que no todo es dinero.
“Para los que trabajan en los hospitales, que si van a estudiar medicina por favor corroboren que tienen vocación y amor por lo que van a estudiar. Porque si vas a estudiar solo por lo que te va a entrar en la cuenta, mejor no estudies”, dijo.
Finalmente agradeció el apoyo de toda la población y sus oraciones.
“Muchísimas gracias a todos por la preocupación por mi bebé”, cerró.
En la conferencia, la madre de Isabella reconoció el trato y atención del Hospital de Puntarenas.
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Más investigaciones en proceso
Luego de trascender la historia de Isabella en el Hospital de Nicoya, se dio el traslado al Hospital de Puntarenas, donde ahora está internada, en cuidados intensivos.
“Estable dentro de su gravedad,” dijo este miércoles la presidenta de la Caja, Marta Eugenia Esquivel, al mismo tiempo que recriminaba y cuestionaba el manejo de este caso.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) anunció primero una investigación interna. Este miércoles, por su parte, elevó el caso a la vía judicial y presentó una denuncia formal a la Fiscalía.
Al trascender la noticia, el Ministerio Público en Nicoya ya había ordenado también la intervención del OIJ para analizar lo ocurrido.
