Allan Arroyo
Este viernes, el presidente, Rodrigo Chaves, arribó de sorpresa a la delegación de policías en Sagrada Familia, y frenó la aplicación del cambio de roles.
Chaves dijo que después de la visita emitirá un video, pero adelantó que la medida queda “en el congelador” y les prometio “que pueden estar tranquilos”.
El mandatario reconoció que volverán a la mesa para adecuar el plan anunciado el miércoles, como parte de la estrategia para combatir la inseguridad.
“Está clarísimo todo”, finalizó el mandatario.
La visita se dio medio del descontento de la Fuerza Pública por el posible cambio de roles, pasando a jornadas de seis días laborales y cuatro libres, dos menos que lo actual.
La intención era tener 9.500 efectivos en las calles, como una medida para combatir la delincuencia.
A pesar de que el anuncio se dio el miércoles, efectivo desde este jueves, el ministro, Jorge Torres dijo el viernes que el cambio aún no se efectiva ni está en firme.
Quejas y cuestionamientos
El mandatario escuchó de primera mano las quejas y cuestionamientos de los efectivos.
Chaves incluso hizo una encuesta para conocer quienes estarían de acuerdo en trabajar dos días más con pago de extras, y le rechazo fue generalizado. “La familia no lo vale” y “para pagar extras pueden tardar seis meses, si es que lo pagan” fueron parte de las respuestas.
“Tendríamos que sacar más platita para cuidar a tres niños. Soy madre soltera”, dijo una de las oficiales directamente a Chaves, justificando su oposición al cambio.
Otro de los oficiales confesó ser padre separado y contó que en los seis días libres cuida a su hijo con parálisis, además de buscar los implementos médicos necesarios.
El mandatario consultó la forma en la que se distribuyen los horarios y reconoció que “estaba aprendiendo mucho” y pedía a sus colaboradores tomar nota.
Otros de los cuestionamientos de los oficiales fue la ausencia del manual de puestos que los pone en desventaja con otros cuerpos policiales. “Hay títulos de bachillerato y estudios esperando dos años para que sean reconocidos”, manifestaron.
Además le afirmaron al presidente que todos ponen dinero de su bolsa para reparar las patrullas y poderlas usar, de lo contrario tendrían que salir a pie. Pagan llantas, cambio de aceite y escobillas para poder usar los vehículos.
Rodrigo Chaves hizo una inspección a la delegación y reconoció que el aumento de más personal implica no tener espacios para que los oficiales duerman o descansen, durante sus extensos turnos de trabajo.
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