Allan Arroyo
El Ministerio Público suma pocos días de investigación y ya acudió al Banco Nacional para indagar lo sucedido con los ¢3.200 millones que harían falta de sus bóvedas.
El fiscal general, Carlo Israel Díaz, sostiene que la primera tesis para las pesquisas es el que dinero en físico fue sustraído. Así lo reconoció por primera vez en una entrevista con Radio Columbia el jueves.
“La tesis principal es que sí hubo sustracción,” dice el jefe del Ministerio Público, mientras aclara que tampoco pueden descartar en este punto otras sospechas.
La entidad bancaria comunicó del faltante a inicios de semana, tras revelarse en los medios. En ese momento, y sin mayores detalles, informaron sobre la investigación en curso.
“El cómo no lo tenemos todavía (…) No hemos logrado determinar cómo fue la salida o la sustracción”, señaló el gerente interino Jaime Murillo.
La otra tesis del banco es una “simulación” de los arqueos, de es decir, de los chequeos mensuales, a través de los cuales se revisaba que el monto era el que correspondía.
“Pudo haber pasado durante años, no hemos detectado ese punto cero (fecha en la que inició la sustracción)”, añadió Murillo, ese día de manera muy escueta.
La posibilidad de que haya sido un problema de sistema no es, al menos por ahora, la principal ruta de investigación de la fiscalía, reconoció el jerarca del Ministerio Público.
Pasos a seguir
Díaz informó que lo siguiente será “determinar si existió o no el faltante (de dinero), eso es primordial, y segundo, quienes fueron las personas que lo cometieron y en qué tiempo lo cometieron”.
El Banco Nacional identificó la inconsistencia en octubre, pero desconoce desde cuando pudo existir. La entidad denunció y suspendió con goce de salario a cinco de sus empleados: dos supervisores del área, un técnico, un custodio y un contador.
Sobre estas personas, el fiscal informó que serán investigados, aunque la causa judicial se abrió “contra ignorado”, es decir, que no hay personas individualizadas como sospechosas.
El expediente lo tiene la Fiscalía de Probidad, Transparencia y Anticorrupción que “está trabajando de manera muy intensa con el Organismo de Investigación Judicial para determinar que sucedió”, defiende Díaz.
El banco considera como muy difícil que el dinero saliera de las bóvedas por todos los mecanismos de seguridad que tienen.
El gerente explicó que el área de donde se habría perdido este dinero está “monitoreada por cámaras de televisión y eso queda en registro”.
“Tenemos la presunción de que salir con una bolsa de efectivo (…) de acuerdo con los controles no es posible”, añadió Murillo.
De oficio
El Ministerio Público recalca que las pesquisas fueron ordenadas de oficio al enterarse del caso por la prensa y antes de que el Nacional presentara su denuncia.
Ya los agentes hicieron primeras visitas para indagar las medidas de seguridad que existen en las instalaciones y definir aquellas que no se aplicaron, si fue el caso.
El Observador pidió a la oficina de prensa de la fiscalía ampliar las declaraciones que Carlo Díaz dio a Columbia, sin embargo nos remitieron un video en el habla del caso en términos generales.
Investigaciones siguen y piden medidas
El gerente del Banco Nacional, Bernardo Alfaro, dio este viernes su primer mensaje sobre el polémico caso.
“Debo reconocer que me duele, me entristece y me indigna, el banco no descansará hasta que la investigación llegue a las últimas consecuencias, hasta que aquellos que originaron esta inoportuna situación respondan por sus actos”, dijo Alfaro en un video compartido a los medios.
Por este caso, el presidente de la República, Rodrigo Chaves, pidió un informe a la entidad bancaria que deberán entregar a más tardar el lunes.
“Esto no se lo robaron al Banco Nacional de Costa Rica, se lo robaron a ustedes. ¿Quiénes son los accionistas del BNCR? Los costarricenses somos los dueños”, dijo el mandatario en la conferencia de prensa de este miércoles 25 de octubre.
Por su parte, desde la Asamblea Legislativa también pidieron acciones inmediatas.
“Esperamos que se sienten las responsabilidades del caso, que quienes cometieron el o los delitos paguen por sus acciones y que se pueda recuperar el dinero”, señaló Paulina Ramírez, diputada de Liberación Nacional y presidenta de la Comisión de Hacendarios.
“A los responsables les debe caer todo el peso de la ley y el Banco Nacional deberá tomar acciones para que no sean los usuarios los que paguen los platos rotos”, dijo por su parte Alejandro Pacheco, jefe de fracción del PUSC.
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