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Aaron Conejo para El Observador
Muchas personas piensan que el ejercicio es simplemente una actividad para verse mejor.
Es más, algunas personas lo relacionan con vanidad y hasta con vagancia. Pero realmente el ejercicio es una actividad que trae una gran variedad de beneficios mentales, físicos, químicos, fisiológicos e incluyendo el de estrés.
¿Qué ejercicios se practican hoy en día para liberar el estrés?
Ejercicio aeróbico y de resistencia
El ejercicio aeróbico es clave para la salud mental y cerebral, al igual que lo es para el corazón.
El ejercicio aeróbico regular provoca cambios notables en el cuerpo, el metabolismo, el corazón y el espíritu. Tiene una capacidad única para relajarse, para proporcionar estimulación y calma, para contrarrestar la depresión y disipar el estrés.
Pero, ¿cómo puede el ejercicio lidiar con problemas tan difíciles como la ansiedad y la depresión?
Los beneficios mentales del ejercicio aeróbico tienen una base neuroquímica.
El ejercicio reduce los niveles de las hormonas del estrés del cuerpo, como la adrenalina y el cortisol.
También estimula la producción de endorfinas, sustancias químicas en el cerebro que son analgésicos naturales del cuerpo y elevadores del estado de ánimo.
Los factores conductuales también contribuyen a los beneficios emocionales del ejercicio. A medida que se pierde peso y aumenta la fuerza y la resistencia, la autoimagen mejora.
Con ellos se gana sentido de dominio y control, de orgullo y confianza en uno mismo. El vigor y energía renovados ayudan a tener éxito en muchas tareas, y la disciplina del ejercicio regular ayuda a alcanzar otras metas importantes de estilo de vida.
El ejercicio y los deportes también brindan oportunidades para motivarse y disfrutar de un espacio a solas o hacer amigos y construir redes.
El ejercicio es juego y recreación. Cuando el cuerpo está ocupado, la mente se distrae de las preocupaciones de la vida diaria y comienza a pensar creativamente.
Ejercicios de autorregulación
La actividad física regular nos mantiene saludables, ya que reduce el estrés. Pero otro tipo especial de ejercicio conocido como ejercicios de autorregulación también pueden reducir el estrés.
El estrés viene en muchas formas y produce muchos síntomas. Los síntomas mentales van desde la preocupación y la irritabilidad hasta la inquietud y el insomnio, la ira y la hostilidad, o sensaciones de temor, aprensión e incluso pánico.
El estrés mental también puede producir síntomas físicos. Los músculos están tensos, lo que provoca inquietud, expresiones faciales tensas, dolores de cabeza o dolor en el cuello y la espalda.
Los músculos de la mandíbula apretados pueden producir dolor en la mandíbula y dolores de cabeza.
Los síntomas intestinales van desde «mariposas» a acidez, calambres o diarrea. La micción frecuente puede ser una molestia. Un pulso fuerte es común, como lo es la opresión en el pecho. La respiración rápida también es típica y puede ir acompañada de suspiros o tos repetitiva.
Los síntomas físicos del estrés son en sí mismos angustiosos. De hecho, la respuesta del cuerpo al estrés puede hacernos sentir tan mal que nos produce estrés mental adicional.
Durante la respuesta al estrés, la mente y el cuerpo pueden amplificar las señales de angustia de los demás, creando un círculo vicioso de tensión y ansiedad.
Debido a que la causa raíz del estrés es emocional, se controla mejor obteniendo información, reduciendo los problemas de la vida que desencadenan el estrés y modificando el comportamiento.
Pero el control del estrés puede, y debería, también involucrar al cuerpo. El ejercicio aeróbico es un enfoque, ya que la aptitud física ayudará a promover la aptitud mental.
Pero hay otro enfoque: puedes aprender a usar tu mente para relajar tu cuerpo. El cuerpo relajado, a su vez, enviará señales de calma y control que ayudan a reducir la tensión mental.
Los ejercicios de autorregulación son un grupo de técnicas diseñadas para reemplazar la espiral del estrés con un ciclo de reposo.
Ejercicios de respiración
Incluso sin meditación formal y respiración controlada, el suave estiramiento muscular del yoga puede reducir el estrés. Pero si eso no es lo suyo, los simples ejercicios de respiración pueden ayudar por sí mismos.
La respiración rápida, superficial y errática es una respuesta común al estrés. La respiración lenta, profunda y regular es un signo de relajación. Puedes aprender a controlar tus respiraciones para que imiten la relajación. El efecto, de hecho, será relajante.
Ejercicios mentales
El ejercicio corporal puede ayudar a relajar la mente, y las maniobras mentales también pueden hacerlo. Pero los ejercicios mentales son una opción también muy saludable.
La meditación es un excelente ejemplo de la unidad de la mente y el cuerpo. El estrés mental puede acelerar el corazón y elevar la presión sanguínea. La meditación puede revertir los signos fisiológicos del estrés.
Los estudios científicos de maestros hindúes de yoga demuestran que la meditación puede, de hecho, disminuir la frecuencia cardíaca.
También disminuir la presión arterial, reducir la frecuencia respiratoria, disminuir el consumo de oxígeno del cuerpo, reducir los niveles de adrenalina en la sangre y cambiar la temperatura de la piel.
Caminata al aire libre
Es un ejercicio Perfecto para practicar solo o acompañado, es la oportunidad para meditar o simplemente establecer una charla que le ayude a desahogarse del trajín diario. Se puede decir que funciona como ejercicio restaurativo.
Contra estrés, por salud o por diversión la gran verdad es que hacer ejercicio es una actividad que siempre nos va a brindar un sin fin de beneficios.
Los que piensan que no tienen tiempo para ejercicio físico, tarde o temprano encontrarán tiempo para la enfermedad. (Edward Stanley)
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